La Calibrachoa, también conocida como «petunia miniatura» o «super petunia», es una planta anual muy apreciada por su abundante floración y su facilidad de cuidado. Con sus pequeñas flores en una amplia gama de colores, desde el rojo, rosa, morado y blanco hasta tonos bicolores, la Calibrachoa es ideal para agregar un toque vibrante y alegre a jardines, balcones, macetas colgantes y jardineras. Su hábito de crecimiento compacto y su capacidad para producir flores durante toda la temporada la convierten en una opción perfecta para quienes buscan una planta de bajo mantenimiento pero llena de color.

En Vita Garden, ofrecemos Calibrachoa de alta calidad, cultivada con esmero para que puedas disfrutar de su alegre floración en tu hogar o jardín.

Cuidados de la Calibrachoa

1. Luz:
La Calibrachoa prefiere luz solar directa, por lo que es ideal para jardines o espacios con buena exposición al sol. Requiere al menos 4 a 6 horas de luz directa al día para mantener su floración abundante y saludable.

2. Riego:
Riega la Calibrachoa regularmente, pero evita el exceso de agua. Deja que la capa superior del sustrato se seque antes de volver a regar. Durante el calor del verano, puede necesitar riegos más frecuentes, especialmente si está en macetas colgantes o jardineras. Asegúrate de que el agua drene bien para evitar que las raíces se pudran.

3. Sustrato:
La Calibrachoa necesita un sustrato bien aireado y con buen drenaje. Una mezcla de tierra para macetas ligera, que permita el drenaje adecuado del agua, es ideal para esta planta. Asegúrate de que las macetas o jardineras tengan orificios de drenaje.

4. Temperatura:
La Calibrachoa prefiere temperaturas cálidas, entre 18 °C y 24 °C. No tolera el frío, por lo que es mejor plantarla después de las últimas heladas de primavera. Si vives en un clima frío, es recomendable cultivarla en macetas para que puedas moverla a un lugar más cálido.

5. Humedad:
Aunque la Calibrachoa es bastante tolerante a la sequedad, se beneficia de una humedad moderada. Evita que el aire sea demasiado seco, especialmente en climas cálidos. Si es necesario, puedes aumentar la humedad alrededor de la planta con un humidificador o rociando ligeramente las hojas.

6. Fertilización:
Fertiliza la Calibrachoa cada 2 semanas durante la temporada de crecimiento (primavera y verano) con un fertilizante balanceado para plantas con flores. Esto fomentará una floración más abundante y saludable. Durante el otoño y el invierno, puedes reducir la fertilización.

7. Mantenimiento:
Retira las flores marchitas y las hojas secas para promover una floración continua. La Calibrachoa no requiere una poda intensiva, pero puedes recortarla ligeramente para mantener su forma compacta. Si las plantas se vuelven muy largas o desordenadas, puedes podarlas para mantenerlas atractivas.